Miércoles 8 de noviembre, 10 de la mañana. 164 estudiantes de séptimos básicos de los colegios: Carlos Fernández Peña, Likankura, Luis Arrieta Cañas, Santa María y Tobalaba, todos pertenecientes a la Corporación Municipal de Educación de Peñalolén, llegaron hasta el Parque Educativo Likandes en el Cajón del Maipo. Iniciaban así su Travesía Caserta 2017.
Sin tener total claridad de a qué iban, llegaron con ganas de pasarlo bien. Y no fue solo eso. Fueron tres días y dos noches de campamento, en medio de la naturaleza. Compartieron en pequeñas comunidades -llamadas “Lof”- con sus compañeros y también tuvieron muchas oportunidades para conocer a estudiantes de los otros colegios.
“En el colegio somos enojones, pero aquí no. Yo también soy enojón y aquí estoy feliz”, dijo Isaac, uno de nuestros aventureros. Travesía es una experiencia de aprendizaje integral donde el respeto mutuo y la creación de vínculos son clave en la convivencia de niños y niñas.
En el tiempo que duró esta aventura, los estudiantes fueron invitados a experimentar en 16 mundos relacionados con oficios, ciencia, arte, creatividad, innovación y actividad física. Cada uno de estos mundos fue una oportunidad que les permitió reflexionar, experimentar, conocer y valorar cada uno de los momentos en el campamento. “Aquí hice un montón de cosas que no había hecho nunca. Me atreví”, contó Benjamín.
En los seis años años en que Caserta realiza Travesía han participado más de 1.300 estudiantes de 17 instituciones educativas, de 6 comunas de la Región Metropolitana. Y ésta es la primera de 2017. Aún queda mucha más aventura.
